jueves, 24 de abril de 2008

Un paseo por la liga

domingo, 13 de abril de 2008

La importancia de aplicar el reglamento a la táctica en el Fútbol Sala


El conocer el reglamento de forma teórica no es suficiente, hay que llevarlo constantemente a la práctica en los entrenamientos, partidos de entrenamientos, juegos con tareas y competencias, por lo que el entrenador tiene que fijar siempre en los ejercicios técnico – tácticos a realizar, las reglas de juego y tener claro que estas no se alejen de la realidad de juego, (aplicar el reglamento en todo momento).
La Pericia táctica del jugador puede ser elevada mucho mas mientras este conozca mas del reglamento competitivo, esto es aplicable también a todo el equipo, por lo que el conocimiento de las reglas de juego es primordial, ya que un equipo que las desconozca o tenga dudas de estas, estaría entonces en desventaja táctica, si el contrario aplica un juego donde por ejemplo, busque la 6ta falta por delante del doble penalti y esta sea cometida, el disparo en primer lugar, sería mas cercano a la portería por delante de los diez metros del doble penalti, y quizás ese partido sea definido al hacer efectiva esa falta.
Estar constantemente encima del jugador para que este saque ventajas del reglamento, es importante, otro ejemplo de ello es que en ocasiones vemos a jugadores que en un saque de banda va a buscar le pelota lentamente y de espalda al terreno, esta actitud es negativa, mas si se tenemos en cuenta que va perdiendo el juego o a su equipo le hace falta buscar el empate, pero si esta acción la realiza velozmente, utilizando su vista periférica y rapidez mental se podría sorprender al contrario y sacar ventaja táctica de la acción (mentalidad táctica).
El aprovechamiento de la ventaja es otra arma letal en función del juego, pues si tenemos un pívot técnico, potente y rápido, el cual es obstaculizado constantemente y se mantiene concentrado y solo se detiene cuando escucha el silbatazo arbitral puede sacar ventajas sobre el juego sucio del contrario que en ocasiones hace perder la concentración a jugadores habilidosos, en este ejemplo se pone claramente la ventaja que pudiera permitirle la flexibilidad de las decisiones arbítrales a los defensas o delanteros, hay partidos que suelen írseles de las manos a los árbitros, esto por supuesto, no es lo generalizado en el Fútbol sala, por lo que nuestros entrenadores, tienen la misión de educar a sus atletas en función del reglamento para que solo detengan su juego cuando sea escuchado el silbato del principal, de esta manera los jugadores no se dedicarán a esperar que el arbitro intervenga en acciones que para ellos puedan ser faltas o incorrecciones e incluso asumir estas actitudes para justificarse de sus acciones mal logradas en el juego, (evasión) perdiéndose ocasiones ventajosas para su equipo en muchas acciones del juego.
Si el portero conoce bien sus funciones tácticas y estas las aplica bien partiendo del reglamento tendríamos en él no solo a un defensor de la portería, pues este contribuiría mucho en el ataque, ya que en muchas situaciones de peligro en el área los arqueros buscan, muchas pelotas arriesgando su físico y los delanteros o atacantes suelen hacerles faltas tontas que solo resuelven frenar sus ataques y hacer que el arquero salga del peligro cobrándose a su favor la falta y de esta manera pasa al ataque desde su propia área sin ningún tipo de oposición.
Los jugadores tienen que conocer toda clase de castigo, para no errar, hay jugadores que efectúan dos toques en los cobros de incorrecciones o faltas, en los saques de banda existen jugadores que se meten dentro de la cancha de juego con el apuro de realizar un pase y el mismo quiere hacerlo con su pie hábil, teniendo ambos pies totalmente o uno de ellos dentro de la cancha. Estos y muchos ejemplos mas se podrían plasmar, pero lo que si nos queda claro la importancia del conocimiento del reglamento de Fútbol Sala, ya que este nos eleva el nivel táctico, de lo contrario tendríamos desventajas tácticas.

jueves, 10 de abril de 2008

Liga de Veteranos


Para la temporada que viene (2008-2009) se está pensando poner en marcha una liga municipal de fútbol - sala exclusivamente para jugadores mayores de 35 años, sin excepciones.

Sería una liga paralela a la actual LMFS y tal iniciativa se creara por la demanda de algunos equipos que han manifestado su deseo en tal sentido.

El problema es si se podrán reunir suficientes equipos para poder formar la liga. Hace 3 años ya se intentó y sólo se apuntaron cinco equipos, por lo que se tuvo que desechar la idea puesto que para que dicho proyecto salga adelante debe haber al menos 8 equipos.

Aún quedan algunos puntos en el aire como pueden ser si se reducirá el número minimo obligatorio de jugadores inscritos para cada equipo (que actualmente es 8 para la LMFS) para facilitar la inscripción a más equipos, si un jugador podrá participar en ambas ligas (Liga de Veteranos y LMFS), si al existir dicha liga se extinguirán los premios a los máximos goleadores mayores de 30 años que existe actualmente en la LMFS, horarios para jugar dicha liga... Por eso es importante que los interesados aporten ideas en tal sentido con la intención de crear una liga al gusto de todo el mundo, o al menos de la mayoría que así lo manifieste.

Así que la idea ya está en marcha. Sólo queda perfilarla y ponerla en funcionamiento. ¿Que te parece?

viernes, 4 de abril de 2008

Una historia sobre un penalty

-¡No le hagas penalti! ¡No le hagas penalti!- le grité desesperado al Loco pero ya era tarde. Su pierna izquierda barría sin ningún pudor a Salomón, puro nervio ese tio. Y Olea, como suele hacer, siguió la jugada de cerca y pitó como el que cambia de marcha en el coche: Penalti y a misa. El Loco no entendía por que la tomé de aquella manera con él, por qué le gritaba sin parar:
- Vamos ganando 5 a 0, cojones y queda un minuto, tonto la poya. ¡mira lo que me monta por un penalti el tio malafollá!
¿Qué le podía explicar? ¿Que prefería el gol de una jugada que de penalti? ¿Que yo sabía que el que lo iba a tirar era nada mas y nada menos que el Tito ? ¿Que estuvo todo el partido esperando una oportunidad como esta? Nada, no le dije ya más. ¿Para qué? Si igual, no hubiera entendido una mierda.
Me fui hacia la portería, resoplando un poco, mucho, toqué el larguero y me sequé el sudor de la frente con la manga de la camiseta. Hice algo de tiempo, miré los rostros de la gente en el banquillo rival y no me di la vuelta hasta que las risitas confirmaron lo que sólo yo sabía. El Tito quería tirar el penalti. Giré y lo vi venir. Avanzaba lento y seguro. Se abría paso entre los suyos buscando la pelota, sin escuchar a nadie, sin mirar a nadie. Los ojos clavados en mí.
A la gente le daba morbo aquella situación: dos porteros frente a frente y que fui el suplente de El Tito durante 7 años; que él ya tiene 36 tacos y yo apenas 25; que seguramente él me enseñó todo lo que sé; que al principio de la temporada se cambió del equipo en el que jugó todo su vida sin explicar demasiado por qué; que la vida nos hizo muy amigos y ahora, con esas cosas que tiene esto del fútbol sala, nos pone frente a frente y bla, bla, bla…
“Por lo visto las cosas no acabaron muy bien entre esos dos por culpa de una tia, ¿no?.” Diría alguien desde detrás de mi banquillo. “¿¡Ah si !?”, se hizo el tonto mi delegado ya que conocía de sobra la historia entre El Tito y yo. Una historia que sabía todo el mundo con más detalles de los deseados para mi. Y aunque El Tito jamás había tirado un penalti, nadie se sorprendía de que lo hiciera ahora contra su ex equipo, frente a su ex suplente. Es más, todo el mundo lo esperaba con sádico recochineo.
Aquel partido pasó de ser un partido más a ser EL Partido.
Ahora nos enfrentábamos El Tito y yo. Todo el mundo podría estar diciendo lo que quisiera pero los únicos que sabíamos la historia de verdad éramos él y yo. No, miento: él, yo y Merce. Justamente Merce. Ella estaba en la grada. En el lugar de siempre, en el asiento de siempre, el mismo asiento desde el que había animado a su ex, El Tito. ¿Qué habrá sentido? Ni idea, jamás le pregunté. Mejor dicho, jamás quise saberlo. En ese momento tampoco la busqué con la mirada. ¿Para qué? ¿Para ponerme triste si descubría que lo miraba a él? No tenía sentido. Traté de concentrarme en la pelota, de adivinar cuál sería la opción que elegiría El Tito. Media grada le chillaba, le silbaba, pero a él no le importó. Él quería hacerme un gol a mí, no a ellos, no a su ex equipo. ¿Y yo por quién paraba? ¿Por el equipo, por mí, por él o por ella?
No lo tuve claro. Dudé. Tal vez por eso fue gol. El Tito no lo celebró y yo preferí ir a buscar la pelota dentro de la portería, pelearme si eso con alguno, cualquier cosa con tal de no mirar a la grada, con tal de no enterarme nunca si Merce festejó el gol.

(Los personajes aparecidos en esta historia no son verídicos, excepto Olea, que tiene que estar pitando penaltíes en todos lados, como Dios manda).

Pablo P.

martes, 1 de abril de 2008

La Maldición de Joyma




Jornada 16 a 7 del final de la liga y Café Bar Joyma saca 11 puntos al segundo clasificado. Aun faltan por disputarse 21 puntos. La liga está sentenciada... o eso se debería pensar. Pero ¿que tal si echamos un vistazo a la historia?.


Resulta curioso que Café Bar Joyma a pesar de haber estado presente en cada una de las ediciones de la liga y con plantillas plagadas de buenos jugadores jamás ha ganado la liga. En cambio es el equipo que más veces ha quedado en segunda posición. Hubo un año incluso que teniendo la liga ganada le fueron descontados 3 puntos en la última jornada por alineación indebida de uno de sus jugadores, yendose la liga para su perseguidor en aquel entonces. Sin ir más lejos, el año pasado, en circunstancias muy similares a las del presente año, cuando sacaba una gran diferencia al segundo, se lesiono su buque insignia (Mangote) y empezaron a perder partidos de tal manera que se esfumo la gran diferencía que habia y terminó perdiendo la liga (se clasificó incluso en tercera posición).


También es verdad que este año cuenta con un equipo más compensado y se crea la duda-debate de que sucedería si Mangote (78 goles el solito, tantos goles como goles a favor del segundo equipo más goleador de la liga) no jugara el resto de partidos que restan de la liga. ¿Sería entonces Joyma un equipo batible o por el contrarío, el resto de jugadores mantendrían el nivel?.


También es importante que se presente a todos los partidos aun teniendo matematicamente ganada la liga. No olvidemos que dos incomparecencias equivale a la descalificación.


Así que viendo los precedentes no es facil afirmar que Café Bar Joyma tiene ganada la liga. Hasta el último partido siguen estando las espadas en alto.


Otro cantar es que Jose, el infatigable delegado de Joyma, "el Abramovich de la liga" como le llaman en algunos foros, por fin le sea dada la alegría por parte de sus jugadores del ansiado título, porque sin duda ya se lo merece por su dedicación y por tantos años a pie de cañon. ¿O no?.

Duncan Edwards


Mira que golazo, tu



A ver si por aquí tambien vamos marcando estos golazos